¿Qué hace un Bio estimulante?
Los bioestimulantes son sustancias o microorganismos cuya función es acelerar los procesos naturales que mejoran la absorción y asimilación de nutrientes. Por esto son un excelente primer paso creando las condiciones para un suelo saludable, una mejor calidad de los cultivos, un mayor rendimiento y una mayor biodiversidad.
El adoptar en nuestros paquetes tecnológicos el uso de productos bioestimulantes es una parte clave para alcanzar un futuro sostenible tanto ecológica como económicamente. La producción agro alimentaria a nivel mundial debe buscar enfilar sus prácticas hacia la agricultura regenerativa esto debido que la tierra arable y el agua son recursos limitados y la demanda de alimentos crece cada año.
La respuesta está en el suelo
A diferencia de los fertilizantes químicos convencionales un bio estimulante no aporta propiamente nutrición a la planta si no que le proporciona los elementos y condiciones al suelo para que estos nutrientes estén bio disponibles para ser aprovechados por la planta. Esto a su vez provoca que nuestros cultivos de manera natural activen mecanismos de defensa, hormonales y de crecimiento que mejoran su potencial productivo.
La biodisponibilidad se refiere a la concentración de un elemento que se encuentra disponible para los organismos vivos. Es la relación que hay entre la concentración en el suelo y el nivel «aprovechado» por el organismo en este caso nuestro cultivo.
Básicamente aplicar elementos nutricionales químicos a un suelo sin capacidad de hacerlos bio disponibles es tirar dinero a la basura.
Bioestimulantes, la mejor opción
Aunque se ha tratado de difundir ampliamente el aspecto positivo de los bioestimulantes en los últimos años, rara vez se les considera como una innovación tecnológica. Esto va de la mano con la mala concepción por parte de los agricultores que estos encarecen los costos de producción. Sin tomar en cuenta las graves consecuencias ecológicas que provoca una agricultura sin conciencia del uso racional de los recursos naturales.
En el caso del calentamiento global, esto es particularmente importante. En promedio, la producción agrícola abastece al 21% de la población en crecimiento. El sector agrícola global contribuye con un promedio del 22% con efecto invernadero mundial, con el impacto de los fertilizantes químicos en alrededor del 13%.
Biostimulant-Treated Seedlings under Sustainable Agriculture: A Global Perspective Facing Climate Change. https://www.mdpi.com/2073-4395/11/1/14/htm
Existen varias opciones de bioestimulantes dependiendo de la necesidad particular de cada suelo, región o cultivo. Pero en términos generales existe consenso con respecto a su clasificación:
- Quitina y bio polímeros
- Ácidos húmicos y fúlvicos.
- Aminoácidos y mezclas de péptidos.
- Extractos de algas y plantas.
Pero es un hecho bastante comprobado que el atender el suelo a través de bioestimulación disminuye el uso de fertilizantes químicos, mejora el uso de los recursos hídricos y finalmente contribuye a una mejor operación agrícola tanto económica como ecológicamente.